¿No estoy Yo aquí?

¿No estoy yo aquí que soy tu Padre?
Ven, descansa en mí.
Deja que yo te alegre y sostenga,
permite que yo sea tu gozo más profundo.
Te enseñaré el sendero de la vida,
de la vida en abundancia.
Pero cuento con tus tiempos
y los conozco mejor que tú.

No tengas miedo,
estás en mis brazos,
te protejo y te guardo
hasta de noche,
mientras duermes en el silencio del mundo,
susurro en tu corazón que te amo
y que siempre estaré contigo.

(Respuesta al salmo 15, Matu Hardoy)